sábado, enero 31, 2009
De tiburones y dragones
Hace un par de dias, asistí al pase de transparencias anual de la empresa, fue una reunion de todo el grupo de trabajo, donde se nos informó, entre otras cosas del frenazo de la actividad del negocio en el momento economico actual y de las nuevas directrices fundamentales para enfrentarlo. Se hizo alarde de algunos rebuscados eufemismos, denominar por ejemplo al estancamiento de las ventas “ haber alcanzado la madurez en la curva evolutiva del producto” es sin duda uno de los mas delirantes, hubo graficas, exhibición de cifras y porcentajes incontrastables (incontestables por lo tanto), solo al final, a punto de acabar la charla se mencionó al Jabberwock.
Hasta ahora el mensaje habia sido:
“ la eficiencia, no es suficiente. Para ser eficaces hemos de ser eficientes en el menor tiempo posible”, o lo que es lo mismo, ganar cuanto antes la mayor cantidad de pasta. Estas prisas ya eran una indicio del previsible rumbo que tomarian las cosas, aun así se consiguieron los objetivos. Esta suerte de frenetica carrera en pos del dividendo, ha influido de forma muy negativa en el entramado social y como resultado, embelesada por el espejismo del lujo y la ostentación, una vez mas, engatusada por la comodidad que dá el dinero que no la felicidad como repite insistentemente el refran siempre en boca de alguno, la gente se ha apartado aun mas de la gente.
Durante la reunion, este concepto de “eficacia” fue abolido, en su lugar se erigió un nuevo manifiesto:
“ satisfacción = € “. A pesar de la apariencia de aseptica exactitud que proporcionan las formulas matematicas, la ecuación encierra cierto intríngulis. Si antes el negocio era hacer dinero a expensas de la demanda social y sin tener en cuenta las necesidades reales de los clientes, ahora, dicho en jerga empresarial, el negocio está en conservar la cuota de mercado, es decir, tener a los clientes contentos. Esta situación no es comoda para el sector financiero, indudablemente ellos prefieren vender lo que les convenga al precio que les dé la gana, plegarse a los caprichos de la gente debe ser para los inocentes genocidas que integran la elite economica, una forma de prostitucion, es lo malo de poner la humana ilusion en el mercado de valores. A los trabajadores del departamento tecnico no se nos exigió explícitamente tener sexo con los clientes, sin embargo en algun momento creí entender que los comerciales debian ser mas complacientes con el publico, en las actuales circunstancias no quiero imaginar que quiere decir eso.
Invadido por una injustificada desazon, que se habia ido acentuando a lo largo de aquel conclave obrero, aparece en escena la voz inglesa “jabberwocking” , que en realidad pasó casi desapercibida, probablemente por aquello de que el cerebro ignora lo que no entiende, no solo no hubo ningun comentario en la sala sino que se produjo uno de esos raros silencios de los que se suele decir “ha pasado un angel”, hasta que el jefe que ponia la voz a las transparencias añadió una breve aclaracion que yo amplío:
El Jabberwock, en castellano Galimatazo o Jerigondor, es un bicho grande y feo semejante a un dragon. Asi lo pintó John Tenniel, un Sir, que ademas era dibujante de viñetas, allá por el final del siglo XIX, basandose en las descripciones del poema Jabberwocky, escrito por Lewis Carroll en 1872, incluido en su obra, Alicia a traves del espejo. Extrañamente , a pesar de haber prologado las obras completas de este autor y sin duda haberlo leido, Borges no incluye al Jabberwock en el libro de los Seres Imaginarios.
Una chica americana, por Internet adelanta unas estrofas en ingles del poema Jabberwocky:
And as in uffish thought he stood,
The Jabberwock, with eyes of flame,
Came whiffling through the tulgey wood,
And burbled as it came!
Estrofa que en la Wikipedia podemos encontrarla traducida así:
Y así, mientras cabilaba firsuto.
¡¡Hete al Galimatazo, fuego en los ojos,
que surge hedoroso del bosque turgal
y se acerca raudo y borguejeando!!
Esta misma chica aclara que en su casa, jabberwocking es sinonimo de farfullar trivialidades sin sentido. Según el Collins “to jabber” quiere decir, farfullar, hablar atropelladamente.
Jabberwocking en el ambito del trabajo es aquella actividad que reduciendo gastos, mejora los beneficios, sin que ese deficit sea percibido como tal. Para ilustrar el invento, se puso como ejemplo a aquel empleado de aerolíneas que decidió suprimir la aceituna de las ensaladas, nadie lo notó y eso supuso miles de dolares de ahorro para la compañía. No se porqué recordé en ese momento el escandalo de la colza, aquel fraude que arruinó la vida de muchas personas antes de que nadie lo notara.
Cuando acabó la reunion, alguien fue interrogado sobre lo que le habia parecido la exposición, recuerdo que contestó con cierto sarcasmo y haciendo con la mano el gesto de frotar el indice con el pulgar:
“ Estoy muy de acuerdo con eso de satisfacción igual a euros…..”,
La respuesta fue muy aplaudida y el compañero ovacionado ampliamente. A veces me parece que no aprenderemos nunca. Me fui de los primeros.
Deprimido, tardé todo el resto del dia en digerir esa amarga sensación.
http://es.wikipedia.org/wiki/Jabberwocky
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario